Cáritas Parroquiales en Cochabamba fortalecen la cultura de la solidaridad y el acompañamiento comunitario

La Pastoral Social Cáritas de Cochabamba a través de Caritas parroquiales continúa ampliando su labor de servicio en las comunidades, consolidando una red de apoyo solidario que crece cada año. Actualmente, 26 parroquias de la Arquidiócesis cuentan con su Cáritas Parroquial organizada, según Ana Karina Tapia, Responsable de Caritas parroquiales de nuestra Iglesia.

Estas Cáritas Parroquiales están formando agentes pastorales que recorrerán los barrios y comunidades para identificar realidades de vulnerabilidad y ofrecer acompañamiento humano y pastoral. “Estamos trabajando fuertemente con la cultura de la solidaridad. No queremos generar pobreza, queremos generar un gran corazón para que la gente pueda ayudar y compartir lo que tiene”, explican Ana Karina Tapia.

Un agente de Caritas parroquial cumple un rol esencial: visitan a personas mayores que viven solas, acompañan a quienes necesitan ir al hospital pero no saben cómo acceder al SUS, y orientan a víctimas de violencia a través de los CAM y otras instituciones de apoyo. Se trata de una red de solidaridad viva, que busca que ninguna persona quede desatendida en su comunidad, según explica Ana Karina Tapia.

En estas semanas previas a la Navidad, varias parroquias realizan diversas campañas solidarias —de salud, de alimentos, de regalos para niños— y Cáritas acompaña estas iniciativas animando a que sean gestos auténticos de cercanía. “No se trata de dar lo que sobra, sino de compartir lo que uno tiene. Los niños se alegran con un dulce o un juguete, pero lo más importante es el gesto humano de cercanía”, señalan.

Para quienes desean realizar campañas solidarias, el primer paso es acercarse al párroco, conocer las necesidades de la comunidad y coordinar acciones. Algunas parroquias cuentan con centros infantiles, comedores o grupos de adultos mayores con los que se pueden realizar actividades. En otros casos, Cáritas colabora para hacer llegar donaciones a centros alejados como los internados de Bolívar, Tapacarí o Titagallo.

También se pide sensibilidad y responsabilidad al apoyar obras sociales que requieren permisos especiales, como los centros integrales o los antiguos hogares de niños, donde la coordinación debe realizarse con el CDPOS.

“La solidaridad también es acompañar, escuchar, regalar tiempo. A veces una hora conversando con un adulto mayor es un gesto más valioso que cualquier regalo.”

Finalmente, la Pastoral Social Cáritas invita a todas las personas a sumarse como agentes pastorales, para que la solidaridad no sea un gesto de temporada, sino un compromiso que dure todo el año.

“Sería hermoso que Navidad nos inspire a vivir la solidaridad siempre. Las parroquias necesitan agentes pastorales que visiten, acompañen y escuchen a quienes más lo necesitan.”, dijo la responsable de Caritas Parroquiales.